En 1987, la playa de California, en la bahía de Sesimbra, era una de las primeras del país en recibir la Bandera azul, satisfaciendo los criterios requeridos por la Asociación Europea de Bandera Azul como son la calidad del agua, la gestión medioambiental, el equipamiento y la seguridad.

A esto se sumó dos años más tarde la playa de Moinho de Baixo, y posteriormente la playa de Ouro, en 2005. Más recientemente, en 2014, el símbolo de la calidad medioambiental se le otorgo a la playa de Lagoa de Albufeira. La mejora de las zonas de baño, con énfasis en el acceso y el equipamiento, han sido un fuerte empeño de Sesimbra, contribuyendo a los premios recibidos por las playas de Sesimbra.

En suma, a ello, Moinho de Baixo recibió en 2014 el título de playa accesible, reservada para aquellas playas que ofrecen las condiciones necesarias para dar la bienvenida a personas con movilidad reducida, uniendo la playa de Ouro en el pueblo de Sesimbra, que ha acogido la bandera azul por muchos años. La calidad de las playas de Sesimbra fue también reconocida por Quercus (Organización medioambiental portuguesa) que otorgó la Bandera Dorada de Calidad a las playas de Ouro, Moinho Baixo, Bicas y Lagoa de Albufeira, debido a la calidad de sus aguas.

Este reconocimiento premia el trabajo realizado en la limpieza de las playas, la construcción de infraestructuras de apoyo como pasarelas peatonales, servicios sanitarios, centros de información, de entre los que sobresale el Kiosco de playa de Ouro, un parking mejorado y la promoción de una serie de actividades para los vacacionistas, en particular las bibliotecas de playa y actividades de educación medioambiental, ambas asociadas con las banderas azules.